José Antonio Artusi declaró que «el radicalismo tiene la obligación de recuperar su identidad, su autoestima; y los radicales debemos, como acertadamente señaló el Presidente de la Convención en Rosario, volver a estar orgullosos de ser radicales. Fuimos nosotros los que hicimos YPF, no los que la entregamos y extranjerizamos. Menem y Kirchner lo hicieron. Somos nosotros el partido más claramente identificado a lo largo de la historia con la educación pública, laíca, gratuita y obligatoria. Somos nosotros los que hicimos el Banco de Entre Ríos, no los que lo entregaron, no una sino dos veces. No fuimos los radicales los que recurrimos a los inestimables servicios de un «diputrucho» para privatizar Gas del Estado. No fuimos nosotros los que proponíamos convalidar la ley de autoamnistía de los militares en el 83; fuimos sí los que impulsamos los juicios a los responsables del terrorismo de Estado y del terrorismo guerrillero, cosa que ningún otro país del mundo hizo antes ni después».
Artusi enfatizó la «necesidad de – sobre la base de la recuperación de la identidad, la doctrina, y la conducta que caraterizaron históricamente al radicalismo – construir rápidamente, a partir del diálogo con los actores sociales, económicos, culturales y educativos de la provincia, una propuesta de gobierno que contemple programas y proyectos concretos que den respuesta a las demandas más acuciantes de los entrerrianos: trabajo, educación ,salud, seguridad, justicia.
De todos modos, José Antonio Artusi alertó acerca del riesgo de «poner el carro delante de los caballos; no podemos confundir un proyecto de gobierno con meras alianzas electorales. Ese fue el error fundamental de la Alianza, y no podemos tropezar dos veces con la misma piedra. No debemos cerrarnos a eventuales acuerdos que nos pemitan aunar fuerzas en pos de integrar un frente común con otros partidos progresistas, pero sólo sobre la base de profundas y explícitas coincidencias programáticas y doctrinarias».
«¿Qué podemos tener que ver los radicales con quienes en 1997 se reivindicaban como la «encarnadura» del gobierno menemista en Entre Ríos, y que no vacilaban en articular una alianza conservadora para defender las «transformaciones» de ese gobierno, en tandem con el MODIN y la UCEDE?,» se preguntó Artusi. «Por ello, ofende el sentido común y la historia de este partido que algunos puedan siquiera llegar a pensar que el radicalismo puede avalar la candidatura de alguien ajeno a nuestra identidad política», concluyó.-